UN DÍA POR SOBREPUERTO:
BERGUA-ESCARTÍN-IGLESIETA
DE LOS MOROS
15-1-2018
Horario:
Bergua-Barranco
Forcos (pasarelas): 17 minutos
Barranco
Forcos-Escartín: 1 hora
Escartín-Forcos
(pasarelas): 50 minutos
Barranco-Iglesieta
Moros: 25 minutos.
Iglesieta
Moros-Bergua: 40 minutos.
Sobrepuerto
es una comarca o territorio a medio pie entre Alto Gállego y
Sobrarbe, sus aldeas pertenecen a alguna de estas 2 comarcas.
Solamente una está habitada, Bergua, el resto, sufrió el terrible
fenómeno de la despoblación al igual que numerosos pueblos
cercanos, se contabilizan muchos en la provincia de Huesca, siendo la
que más aldeas deshabitadas tiene de todo el territorio español.
El
resto de aldeas de Sobrepuerto son: Ainielle (famosa por el libro la
lluvia amarilla de Julio Llamazares), Otal, Cillas, Cortillas,
Basaran, Sasa, Ayerbe de Broto y, la que visitaremos hoy, Escartín.
No se si se me olvida alguna (Yosa de Broto no se si está incluida
como aldea de Sobrepuerto) Algunas pardinas completan los lugares en
los que había actividad humana en este territorio.
La
jornada de hoy por esta comarca la completé visitando un curioso
eremitorio rupestre: la iglesieta de los moros, un lugar que invita a
las leyendas y cuyo culto se debe remontar a muchos siglos atras.
Lugar curioso la verdad.
El
punto de inicio es Bergua. Para llegar a esta localidad, debemos
coger una pista asfaltada que nace en Fiscal y, tras 7 kilómetros,
llegaremos a la localidad. La carretera está en perfectas
condiciones a día de hoy.
Dejamos
el coche al inicio de la localidad, un cartel dice que solamente se
puede acceder con coche los vecinos y servicios, hay sitio para dejar
el coche pegado a la carretera.
Descendemos
hacia las casas del pueblo, practicamente rehabilitado, pasamos
delante de su iglesia y en dirección oeste vamos acercándonos al
final del pueblo.
Veremos
varios carteles con indicaciones hacia las pozas, el río y un cartel
de madera con numerosas localidades. La verdad que es un buen punto
de inicio para numerosas posibilidades.
Al
final del caserío veremos ya una señal y un panel informativo hacia
la iglesieta de los moros que será mi última parada de la jornada.
Empezamos
a bajar por el bosque, una bonita senda que desemboca en el fondo
donde llegamos después de un cuarto de hora. Aquí veremos 2
pasarelas para cruzar el barranco de la Pera, en primer lugar y el
barranco de Forcos a continuación. Entre ambas pasarelas nace a mano
izda un camino que nos llevaría a Basaran.
Tras
cruzar la segunda pasarela llegamos a un cruce. A la izda giramos
para seguir a Escartín. A la vuelta giraremos la derecha para
visitar la iglesieta de los moros.
Seguimos
las marcas del PR HU 117, los primeros minutos iremos siguiendo el
barranco de Forcos, dejamos a la derecha una casa en la que hay algun
perro al que no le hace gracia mi presencia por sus territorios, y
empezamos a ganar altura.
A
los 10 minutos desde las pasarelas llegamos a otro cruce. Aquí
seguimos en dirección Escartín. El otro camino va a Basaran y Otal,
nos permitiría hacer una circular pero había leido que el camino
estaba algo cerrado en algun tramo y ese día no quería hacer
aventuras.
El
camino empieza a ganar más altura. Había leido que la subida a
Escartín se las prometía. Debo decir que en verano no es
aconsejable ya que la sudada está garantizada.
10
minutos después del último desvío cruzamos el barranco de Fabra,
casi seco a fecha de hoy.
Seguimos caminando en ascenso hasta llegar
pocos minutos después a la caseta Ferrer, muy bien conservada.
Curiosa inscripción donde pone que es un lugar de descanso. Buen
punto para coger fuerzas.
Me
encanta ver en esta zona lo bien que se conservan las paredes de
piedra seca, los muros que delimitan nuestro sendero así como
diferentes parcelas en los alrededores. La técnica de la piedra seca
fue declarada hace poco por la UNESCO como Patrimonio inmaterial de
la Humanidad.
Cuando
llevamos algo más de una hora desde Bergua ya divisamos Escartín.
Unos
minutos más y tras un último ascenso llegamos a la localidad.
En
el inicio del pueblo sale el desvío hacia Basaran y Otal por
barranco, camino que nos hubiera permitido hacer una vuelta circular.
Escartín
debió de ser uno de los pueblos con más vida de Sobrepuerto,
destacar la gran cantidad de casas. Aun se conservan en pie bordas y
algunas chimeneas.
Tras
pasear 30 minutos por sus casas y tomar un tentempié, vuelvo sobre
mis pasos hasta el barranco de Forcos.
Desde
el cruce de barrancos, antes de volver a cruzar las pasarelas,
encamino mis pasos por el PR que va hacia Ayerbe de Broto. A los
pocos minutos, un cruce nos hará girar a la izda y empezaremos a
subir hasta alcanzar la Iglesieta de los moros 25 minutos después
(en la señal ponía 40 minutos).
Este
eremitorio rupestre representa un culto en estas montañas que se
remonta a una época antiquísima. Me recuerda a otros lugares
recogidos como San Martín de la Val d´Onsera o la ermita de San
Lorenzo de Revilla. Sitios para recordar el rico patrimonio cultural
e histórico existente en el Alto Aragón, el cual, aparte de darse a
conocer como recurso turístico, debe dar lugar a que los visitantes
que realicen dicha visita reflexionen acerca de la importancia
histórica que tuvieron estas montañas en la composición de lo que
hoy es Aragón.
Tras
varias fotos, retorno mis pasos hacia Bergua para dar por finalizada
una jornada matinal de lo más provechosa
