sábado, 18 de noviembre de 2017

TOZAL DE GUARA DESDE EL MESÓN DE NOCITO

16-11-2017

Punto de inicio: Mesón de Nocito (unos 890 metros de altitud)
Desnivel: unos 1200 metros (con 1400 prácticamente de acumulado)
Dificultad: fácil-moderada, no hay ni pasos expuestos, ni trepadas exigentes, ni rampas imposibles, lo único la distancia...
Distancia: 17,8 km aprox.
Horario: 7 horas y media sin contar paradas
Treparriscos: Javier, Anxonio y Jorge

Sigue sin llover, llevamos varios días de sequía meteorológica pero no montañera, tras diversas excursiones y ascensos a míticos a repetidos y conocidos lugares (Mesa de los tres reyes, Anayet, tozal de Guara desde Used..) decidimos abordar el gigante de Guara por uno de sus dos caminos de la vertiente norte.

Para llegar hasta el mesón de Nocito salimos desde Huesca dirección Arguis, y una vez aquí seguimos la carretera hasta Belsué, dejamos atrás éste pueblo y continuamos la carretera y tras observar varios cervatillos y algun conejo despistado por la carretera llegamos al pueblo de Nocito, una vez aquí tomamos la pista dirección sur dejando a la izquierda el camping, el estado de la pista es algo precario, no hay que correr y yendo despacito se puede llegar hasta el Mesón de Nocito (a un kilómetro y pico del pueblo) donde aparcamos en una esplanada a mano derecha.

Son las 8.30 de la mañana, hace un frío que corta las mejillas y bien abrigados empezamos a caminar cruzando por primera (y no última vez) el barranco de la Pillera por donde aún baja algo de agua, aunque no demasiada.





Tras cuarenta minutos prácticamente llaneando el barranco llegamos al primer cruce del día, el camino va a ser muy claro y muy bien indicado tanto por postes indicativos como por mojones, tomamos dirección tozal de guara por petreñales y comenzamos a ganar altura rápidamente por una zona abierta primeramente, y por un bosque mixto de hayas y pinos algo después.


Impresiona mucho las formaciones geológicas de la zona

En un ratico estaremos ahí! Ande? Ahí!



Cruzamos el riachuelo por última vez durante la subida y poco después viramos a la derecha dirección sureste por el barranco de la Espátula, donde las hojas pueblan el camino convirtiendo el paraje digno de admiración.





Tras ganar altura regularmente, llegamos al collado de las Chemelosas (1370) y nos tomamos un respiro, son las 10.15 y el sol comienza a hacer acto de presencia.


Llaneamos unos metros por una zona semiabierta a nuestra derecha dirección suroeste, asoma el soleado Corcurezo ante nuestros ojos, ganamos altura ligeramente entre pinos y algún asombroso tejo.



 


Media hora después llegamos al collado de Preteñales (1560), punto de unión de varios caminos (la Tejería, el tozal, Nocito..) y sin apenas parar volvemos a tomar dirección sureste en un descenso por un pinar donde asoma algún chinebro pasando por la fuente del mismo nombre, practicamente seca.


abajo a la derecha el llano de los hongos


fuente del chinebro

ejemplar de gayuba

ejemplar de chinebro

Subimos ligeramente, cruzamos el llano de los hongos y nos adentramos en el pinar de la Cubilota de pendiente moderada hasta un claro donde nuevamente cambiaremos de dirección ante unas grandes vistas, la cresta del Fragineto preside la zona y al otro lado, las conocidas pedreras del tozal.



eso es una cresta y no lo del gallo Rodrigo oiga..

Poco después un poste indicativo en un claro, nos señala las dos opciones de subida, decidimos lo más común que es subir por el canal del Abadejo y descender por las divertidas pedreras (aunque en el cartel ponga pedrizas, me da que en ésta bella tierra, decimos pedreras...)

Bajo el sol y con el camino pelín descompuesto, abordamos los repechos finales acompañados por nuestros queridisimos boj y erizón, aunque los buchos en muchos casos, están sequísimos y apenas ofrecen seguridad en alguna mini trepada..







Sobre las 12.50 hacemos cima, no hay apenas aire y hace una temperatura ideal, así que decidimos perder casi una hora entre picoteo, algunos estiramientos y muchas muchísimas fotos (¡como si no tuviéramos desde aquí!)



el coche no lo han robao, buena señal! :)





Volvemos sobre nuestros pasos durante unos metros y enseguida tomamos las pedreras, aquí hay que tener cuidado, jugar mucho con los palos y predecir bien el siguiente paso a dar, la coordinación piernas, brazos y cerebro debe ser máxima, y si existe es un rato divertidísimo en el cual se descidende una gran cantidad de metros en poco tiempo para llegar a un poste indicativo, y de ahí tomarlo hasta el claro donde nos indicaba la "pedriza".








Una vez superado el divertidísimo descenso dudamos en si volver a subir, pero se nos echa el tiempo encima (y la musculación tampoco está al máximo) y ahora anochece antes así que volvemos por el mismo camino para llegar al coche a las 17.40.



LO BUENO: prácticamente todo, se patea mucho tipo de paisaje (barranco, bosque, claros..) con multitud de flora, las vistas son buenísimas y el camino está perfectamente marcado, y si uno se arriesga un pelín, descender por las pedreras es divertidísimo, y además se hace corto!

LO MENOS BUENO: yo diría que casi nada, pero si me piden algo quizás el acumulado (alrededor de 180-200 metros) que no es mucho, pero a la vuelta parece que cuesta un pelín más...

SALUD Y MONTE!

1 comentario:

  1. Pos mira que aún no se subido yo por aquí... esto lo tengo que arreglar ya! :P

    Salud, monte y orujo que no falten!

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